Preciosos Estratos
Este ciclo pretende crear una necesaria conciencia de lo geológico como condición primordial de nuestro tiempo. Las piezas audiovisuales que componen las cuatro sesiones dirigen su mirada hacia las capas profundas de nuestro planeta y exploran, desde diversas perspectivas artísticas y críticas, la estructura sedimentaria bioquímica terrestre y sus complejas relaciones con el ámbito económico, político y cultural.
Repensar la materialidad de lo geológico es un aspecto clave para comprender la relación entre los agentes humanos y no-humanos dentro del contexto contemporáneo del Antropoceno.
El capitalismo y su voraz apetito de recursos energéticos, materiales y minerales se basa en una lógica de globalización que asume la disponibilidad infinita y permanente de los mismos. El agente humano parece disponer del derecho incontestable de extracción y explotación del subsuelo en aras de un crecimiento económico sin mesura. No deja de ser una paradoja que una gran parte de los propios materiales que la Tierra suministra a la industria (combustibles fósiles, silicio, cobre, aluminio, oro, bauxita, níquel o uranio) sean integrados en estructuras, máquinas y dispositivos tecnológicos que se utilizan para seguir perforando, arrancando y extrayendo materias de sus entrañas de manera más eficiente y optimizada. El resultado es una circularidad insostenible y ciega al desequilibrio biológico, económico y social.
Frente a esta relación asimétrica entre lo humano y los recursos naturales, el pensador Dipesh Chakrabarty avanza el concepto de lo planetario. Se trata de un cambio de percepción de la Tierra, que pone de manifiesto no sólo la finitud de sus materias sino la consideración de las capas profundas del planeta como agentes imprescindibles para desarrollar nuevas políticas y gestionar nuevas coexistencias.
Durante décadas hemos interiorizado la imagen de la Tierra como la canica azul (blue marble) que astronautas de la NASA tomaron el 7 de diciembre de 1972 desde el Apolo 17. Una visión exterior, desde el espacio, cuyo apelativo anunciaba ya su fragilidad y vulnerabilidad. A la transparencia poética de la icónica bola de cristal se impone la solidez material del planeta.
Son necesarias nuevas epistemologías, e incluso nuevas cartografías de esa terra incógnita, que son las profundidades sedimentarias acumuladas durante millones de años, y de cómo éstas han sido modificadas por las acciones humanas.
El filósofo Bruno Latour advierte del desequilibrio que el factor humano ha introducido en la llamada zona crítica: una fina capa de pocos kilómetros que incluye parte del subsuelo y de la atmósfera y que alberga toda la actividad biológica de la Tierra. Una zona sensible, reactiva y frágil, cuya capacidad de autorregulación y regeneración está en clara desventaja frente a la explotación industrial de sus recursos.
Los cuatro programas del ciclo abordan lo geológico como condición primordial de nuestro tiempo desde diversas perspectivas críticas: la magia y espiritualidad de las fuerzas telúricas, los procesos neo-extractivistas y neo-coloniales, los minerales y metales contenidos en los dispositivos electrónicos que sostienen nuestra cultura digital, así como las narrativas especulativas y feministas que imaginan futuros conciliadores y responsables.
Comisaria: María Morata, como parte del proyecto Geologías Especulativas: Rocas, políticas y otras estratificaciones, desarrollado por el Instituto de Estudios Postnaturales.
María Morata (Madrid, 1970) ha comisariado proyectos artísticos y programas audiovisuales para distintos museos, festivales e instituciones artísticas (Arsenal-Institut for Film and Videoart, en Berlin; CCCB, MACBA y Centre Ars Santa Mònica, en Barcelona; Intermediae Matadero y La Casa Encendida, en Madrid; Centre del Carme Cultura Contemporánia, en Valencia; o Steirischer Herbst, Graz, Impakt Festival, en Utrecht. Imparte clases sobre cine y videoarte en diferentes universidades. Es miembro del comité de selección de cortometrajes para diversos festivales internacionales y sus áreas de especialización son el cine experimental y las prácticas audiovisuales contemporáneas. En la actualidad, su ámbito de investigación se centra en la relación de las tecnologías de los medios con los agentes humanos y no-humanos en el contexto teórico de la crítica del antropocentrismo y colabora en varios proyectos con el Instituto de Estudios Postnaturales en Madrid. Vive y trabaja en Berlín.
El Instituto de Estudios Postnaturales es un centro de experimentación artística desde donde explorar y problematizar la postnaturaleza como marco para la creación contemporánea. Fundado en 2020, se plantea como una plataforma de pensamiento crítico, un lugar en red que ponga en común a artistas e investigadores e investigadoras preocupados por las cuestiones de la crisis ecológica global, mediante formatos experimentales de intercambio y producción de conocimiento abierto. El equipo está formado por un grupo de artistas, diseñadores, arquitectos, investigadores y pensadores de diversas disciplinas, unidos por un interés por la postnaturaleza como marco para explorar nuevas formas de entender y hacer frente a la crisis climática global.
