El espectro sonoro en estado puro, la resonancia en estado puro; la música de Eleh nos sumerge desde su primer disco en 2006 en un universo que explora la síntesis analógica, enfatizando la oscilación de frecuencias graves y el fenómeno de la resonancia acústica, la presencia física del sonido. Prescindiendo de todo lo superfluo y barroco, cada una de sus composiciones se convierte en un evento sonoro que nace, se desarrolla (aunque casi imperceptiblemente) y muere reverberando al ritmo de unas frecuencias que nos abducen abriendo puertas a otras dimensiones paralelas, configuradas por drones extremadamente minimalistas.
Important Records, Taiga y Touch han tenido el honor de publicar una música que es capaz de continuar donde lo dejaron Terry Riley, Pauline Oliveros, Eliane Radigue o La Monte Young