Duración: | 13 horas 30 minutos |
Nueva entrega semanal de Give me five con las recomendaciones culturales del artista Karlos Gil, cuyos últimos proyectos reflexionan sobre la relación entre el desarrollo tecnológico y los principios del mundo natural, centrándose en eliminar la frontera entre lo orgánico y lo artificial.
-
So Far So Good, de Ursula K. Le Guin
Ursula K. Le Guin, amada por millones de personas por sus novelas de fantasía y ciencia ficción, reflexiona sobre la vida, la muerte y el más allá en So Far So Good, una colección astuta e. imaginativa, terminada semanas antes de su muerte en enero de 2018. Los fanáticos de Ursula reconocerán algunos de sus principales intereses relacionados con la ciencia ficción, así como una extensa exploración sobre el alma y el cuerpo, lo cognoscible y lo desconocido, lo material y lo inmaterial. La escritura es clara, ingeniosa y reverente, mientras Le Guin repasa sus memorias personales mediante la imaginación y la ficción. Cabe destacar el poema Come To Dust que ha servido de inspiración para el título de mi segunda exposición en la galería Francisco Fino, de Lisboa.
-
Kaili Blues (Lu bian ye can), de Bi Gan
Una de mis actividades diarias durante este tiempo de aislamiento y pandemia, ha sido ver cine oriental -principalmente cine chino, surcoreano, taiwanés y tailandés-. Uno de los descubrimientos más apasionantes ha sido el cineasta chino Bi Gan, a pesar de que sólo cuenta con dos películas hasta la fecha. Heredero de las narrativas de decadencia urbana y atmósferas abisales del gran Tsai Ming-liang, Kaili Blues resignifica la cámara como una especie de flaneur o stalker contemporáneo donde retrata la mística y subtropical provincia de Guizhou. El principal personaje, Chen Sheng, debe viajar para ir a buscar a su sobrino, que ha sido abandonado por su padre. Durante el viaje, Chen Sheng para en un lugar llamado Dang Mai, donde el tiempo parece haberse detenido y donde la vida de sus habitantes es un misterio. Una sublime miranda lenta en tiempos de celeridad y aceleración.
-
A Fossil Begins To Bray, de Hiro Kone
En su trabajo narrativo más personal hasta la fecha, la productora de Nueva York Hiro Kone se embarca en un viaje visionario de descubrimiento y diseño de paisajes distópicos y futuros texturizados. Este álbum de 2019 hace posible que cada escucha sea completamente diferente a la anterior debido a una producción quirúrgica de sonidos y frecuencias que van del IDM al glitch, pasando por el techno y el noise. Una auténtica banda sonora para los tiempos que vivimos.
-
Embassytown, de China Mieville
Embassytown es una fascinante novela de ciencia ficción que transcurre en La Ciudad Embajada, lugar donde residen los Ariekei, conocidos por tener un lenguaje donde significado y significante son la misma cosa, ya que la lengua es sólo un medio para expresar la realidad pura. Los Ariekei hablan con dos bocas a la vez, cada una dice un mensaje diferente y sólo la unión de ambas voces produce un sonido reconocible como lenguaje para ellos. A esta ciudad viaja Benner Cho, una immersora capaz de viajar dentro del Immer, una especie de auténtica realidad de la que nuestro universo es sólo un mero reflejo, algo similar al mito platónico del Demiurgo. Un libro imprescindible que conviene leer y releer en tiempos donde ficción y realidad parecen confundirse más que nunca.
-
La Ciudad Oculta, de Víctor Moreno
Uno de los descubrimientos más excitantes de los últimos meses ha sido la película La Ciudad Oculta, un viaje oscuro e inmersivo por las entrañas del metro de Madrid. Este ensayo visual es un delicado trabajo que representa un mundo oculto donde el subsuelo ventila, bombea, drena y expulsa los residuos de la ciudad creando, de este modo, una interesante analogía con el cuerpo humano. El perfecto símbolo del inconsciente de una gran urbe como Madrid.
Biografía de Karlos Gil
A través de la escultura, la instalación, y el video, Karlos Gil (Talavera, 1984) aborda las preguntas fundamentales sobre lo que significa ser humano en el mundo de hoy. Sus últimos proyectos reflexionan sobre la relación entre el desarrollo tecnológico y los principios del mundo natural, centrándose en eliminar la frontera entre lo orgánico y lo artificial.
Estudió en la Escuela de Artes Visuales de Nueva York y en las facultades de Bellas Artes de Lisboa y Madrid, donde obtuvo su doctorado en 2016. Ha realizado numerosas exposiciones internacionales en lugares como Galeria Luisa Strina, São Paulo; Gasworks, Londres; Centre Pompidou, París; HKW, Berlín; Witte de With, Rotterdam; NTU CCA, Singapur; CRAC, Montbeliard; MARCO, Vigo; y CA2M, Madrid. En 2012, participó en la III Moscow International Biennale, y en 2020 en Ars Electrónica (Linz, Austria).