En torno a las exposiciones. Alvaro Urbano. El despertar
Dentro de la programación de
ExplorarExposición actual en La Casa Encendida
Comisario: José Esparza Chong Cuy
El equipo de mediación del departamento de exposiciones de La Casa Encendida ha diseñado una serie de talleres para realizar en casa con niños y niñas de 6 a 12 años. Tomando como punto de partida las exposiciones, artistas, temas o ideas que se han tratado a lo largo de todos estos años en las diversas exposiciones celebradas en La Casa Encendida, se han desarrollado una serie de actividades para el público infantil con la premisa de no utilizar pantallas y emplear materiales que se encuentran de forma habitual en casa. El objetivo es facilitar herramientas para que los adultos desarrollen minitalleres con los más pequeños.
Exposición:
Como un sueño extraño que parece no tener fin, El despertar reanima a un edificio cuya vida parece ya haber expirado. La instalación inmersiva, compuesta por fragmentos que conforman el cuerpo de un edificio, reactiva un inmueble olvidado para provocar un pensamiento especulativo sobre su pasado y futuro.
En esta exposición de una sola escena, el artista Alvaro Urbano (Madrid, 1983) utiliza como objeto de estudio el célebre Pabellón de los Hexágonos, un referente de la arquitectura española proyectado por los arquitectos Ramón Vázquez Molezún y José Antonio Corrales Gutiérrez. La instalación vanguardista –de estructura prefabricada, que puede crecer y reducirse para adaptarse a la topografía- obtuvo el primer premio de Arquitectura en la Exposición Universal de Bruselas de 1958, compitiendo con el Atomium de André Waterkeyn o el Pabellón Philips de Le Corbusier. Hoy en día, este edificio se encuentra en estado de ruina en la Casa de Campo de Madrid. Tras años en desuso, la historia de lo que algún día fue y contuvo es difícil de creer.
https://www.lacasaencendida.es/exposiciones/alvaro-urbano-despertar-10802
Taller: Despierta lo invisible
Objetivo:
En un giro paradójico de las circunstancias, la obra de Alvaro Urbano se encuentra en este momento cerrada y nadie puede visitarla, algo parecido a un abandono. ¿Crecerán flores en los resquicios?
Desarrollo:
Ahora que no hay gente ni coches por las calles, la calidad del aire ha mejorado y los animales se están acercando a las ciudades donde reina el silencio. Nadie está podando las zonas verdes de los parques, ni limpiando las aceras de hierbajos. ¿Cómo imaginas que estará la ciudad?
Elige una ventana de tu casa, la que más te guste. Dibuja en un papel, con un lápiz o rotulador (negro), lo que veas; no importa que sea un patio interior, una pared de ladrillos, los edificios de enfrente o un río. Ahora imagina cómo sería si la naturaleza se apoderara de ese lugar. ¿Crecerían nuevas plantas, flores o hierbas? ¿Habría algún tipo de animal? Si es así, ¿cuál? ¿De qué color sería el aire? Utiliza para ello todos los colores que quieras. Puedes también utilizar la técnica del collage que consiste en recortar partes de revistas y pegarlas sobre el dibujo o representar la escena con tus juguetes favoritos.
Para finalizar la actividad, te proponemos que escojas el monumento de tu ciudad que más te apetezca e imagines cómo puede estar ahora que la naturaleza tiene más espacio para crecer. Puedes dibujarlo, narrarlo o representarlo como más te apetezca. ¿Imaginas qué sonidos le rodean ahora mismo? ¿Se escucha cantar a los pájaros o quizá sólo se oye el rumor de las hojas de los árboles barridas por el viento? Graba el sonido haciéndolo tú mismo.
Materiales:
Papel, lápiz, lápices de colores, rotuladores, ceras o similar. Opcional: revistas, pegamento, tijeras, muñecos, puzzles o juguetes. Reproductor de música y/o grabadora.
Para disfrutar de un estado de relajación mientras se realizan las actividades, os proponemos poner esta lista de sonidos del bosque, (o cualquiera que encontréis en las plataformas digitales).